La marcha nórdica es un deporte apto para todos los públicos, es una actividad suave cuya base es caminar con ayuda de bastones, por ello se adapta a la edad y capacidad de todos los participantes. Al igual que el andar, sus beneficios para la salud son notables, ayuda al sistema cardíaco y respiratorio, no es agresivo para los tobillos, rodillas o espalda, como cualquier deporte combate el estrés y es un antidepresivo ideal.
Se practica con bastones que se regulan en función de la altura de la persona, con punta metálica, ligeros y agarrados a la muñeca. La técnica de esta marcha se aprende en pocas clases y coordinan movimientos no solo de las piernas si no también de las extremidades superiores.
Se puede practicar en cualquier tipo de terreno, tanto en la playa como en la montaña. Aquí, en la Sierra de Huelva, tenemos un pequeño pueblo de unos 500 habitantes, Santa Ana La Real, donde desde hace unos años y desde el ayuntamiento se ha apostado por la práctica de esta disciplina, tanto es así que si nos damos un paseo por los alrededores del pueblo es habitual encontrar jóvenes y mayores con sus bastones caminando.
Esta iniciativa pretende, además de mejorar la salud de los vecinos, dar a conocer este pueblo y su entorno, de belleza excepcional, enclavado en el Parque Natural Sierra de Aracena y Picos de Aroche, es el lugar ideal para disfrutar de la marcha nórdica, sus caminos, su clima, su vegetación. Por todo ello, algunos medios de comunicación internacionales se han hecho eco de las favorables condiciones de nuestra tierra para la práctica de este deporte, y grupos de turistas, sobretodo ingleses, son ya habituales de la zona.
Santa Ana La Real se ha convertido en un referente para la marcha nórdica en España. Este año, 2017, se ha celebrado aquí el I Campeonato de España de Nordic Walking con 150 participantes llegados de distintos puntos de la Península y con un recorrido de 18 km, en un circuito de 6 km por el "Bosque de la las Letras", en los alrededores del pueblo, que ha enseñado a los marchadores una pequeña muestra de la belleza de la zona. Un pueblo entero unido en esta misión, vecinos, Ayuntamiento, Federación de Montaña, voluntarios, establecimientos y el Club Trepamundo, han contribuido a que el evento sea todo un éxito.
Hay que elogiar la labor de todos los que a través de la marcha nórdica han sabido promocionar Santa Ana mostrando las óptimas condiciones para un turismo natural y deportivo, un ejemplo a seguir por los restantes pueblos de una comarca que tiene en su entorno un paraíso de posibilidades.
Mucha fuerza para seguir luchando por este proyecto porque ganas y trabajo ya le ponéis.